miércoles, 17 de diciembre de 2014

El Grinch que robó las ganas de estudiar

Hoy he hecho un examen de una asignatura absurda: Nutrición y Dietética. No es absurda porque yo lo considere así, porque se me ponga entre ceja y ceja decir que es absurda, no. Digo que es absurda porque los propios profesores no le dedican la seriedad y la profesionalidad suficiente mientras imparten las clases. Es una de las "marías" de este curso, sólo son 3 ECTS, y han puesto un examen quijotesco, confundiendo las simplezas que decían en clase con gigantescos temarios, llenos de información, como si el temario fuese el primo hermano del Robbins. Vamos, que se han crecido. O como diríamos en "Lega", se ha flipao. ¡Si hasta han puesto más preguntas que los de Cirugía!

Este tipo de cosas son las que hacen que me entren unas ganas locas de coger el fonendo de las olivas, hacerlo girar a mi alrededor como los lanzadores de peso/disco olímpicos,y no parar hasta quedarme sola. Y es en estos momentos cuando me pregunto si de verdad es taaaaaaaan difícil encontrar a personas que estén conformes y se sientan realizados con su trabajo. Porque esta gente no lo está, ni lo estaban los de Anatomía de hace unos años. Lo que les hace feliz es amargar a la gente. A sus alumnos. ¿Suspendes al 70% y te crees buen profesor?¿En serio?Es decir, que yo en el futuro, si mato al 70% de mis pacientes, ¿seré buen médico?

Está claro que hay problemas en la Educación, sobre todo económicos y con tanta LOGSE, LOE y como leches quieran llamarlo, pero el gran problema, señoras y señores, es la falta de motivación, dedicación y vocación de los profesores. Y eso, no se arregla con dinero, ni con leyes absurdas que cambian con cada nueva legislatura. 


No hay comentarios:

Publicar un comentario

¡No seas tímid@ y aporta tu pequeño granito de arena a este blog!

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...